A pesar de que existen diferentes normativas en la Constitución respecto al derecho antidiscriminatorio, hoy en día nos seguimos encontrando con diferentes tipos de barreras que afectan, en el ámbito laboral, a las personas que viven con VIH y vulneran así sus derechos. Entre ellas están barreras institucionales o legales, barreras causadas por protocolos internos que impiden el acceso y disfrute de ciertos servicios, y barreras actitudinales, basadas en prejuicios hacia las personas con VIH
Se entiende por discriminación todo trato diferenciado hacia otra persona o grupo sin que exista una causa objetiva y razonable que lo justifique
Desde el año 1998, la Organización Mundial de la Salud (OMS) y la Organización Internacional del Trabajo (OIT) afirman que una persona que vive con VIH puede desempeñar cualquier empleo. De tal manera, reconocen que la exigencia de pruebas de VIH para el acceso de empleo son totalmente injustificables.
En España es ilegal la realización de pruebas de detección de VIH sin el consentimiento explícito del trabajador
Los reconocimientos médicos en el ámbito laboral son un derecho, no una obligación, y los organismos implicados deben ser totalmente escrupulosos con el trasvase de información del cuerpo médicos a los directivos. La Ley orgánica 1/1982 de protección civil del derecho al honor, a la intimidad personal y la propia imagen es del todo rigurosa con este tipo de información.
A pesar de que la ley defiende ciertas vulnerabilidades de los trabajadores, revelar el seroestatus en un empleo lleva, en mucas ocasiones, a un trato discriminatorio ante nuevos puestos de trabajo, despidos, cambios de funciones, rechazo por parte de compañeros, acoso laboral o mobbing, que en muy contadas ocasiones pueden llegar a ser demostrables. Hecha la ley, hecha la trampa. Si vives con VIH y quieres revelar tu seroestatus en tu puesto de trabajo estaría bien reflexionar sobre ciertos aspectos antes de hacerlo publico: ¿por qué quieres decirlo?, ¿cómo y cuándo lo vas a contar?, ¿se mantendrá la confidencialidad?
El colectivo de mujeres VIH+ son un grupo especialmente vulnerable al sufrir de forma simultanea discriminaciones múltiples en la promoción y el acceso a un trabajo digno
No podemos pasar la oportunidad de denunciar los requisitos para acceder a muchos puestos de la oferta pública. Los organismos públicos deberían ser los máximos representantes de la Constitución, pero en muchas ofertas de funcionariado discriminan abiertamente a las personas que viven con VIH, negándoles el acceso; lo que supone una muy grave contradicción.
En la mayoría de los trabajos no se comparten vías de transmisión del VIH y, en caso de exposición por accidente, establecer el protocolo universal de normas de seguridad hace inviable el riesgo de una transmisión. En Madrid, a día de hoy, un taxista con VIH no puede obtener licencia por una Ordenanza de 1980, que recoge que para acceder al permiso municipal de conductor de autotaxi tendrá que acreditar no padecer enfermedad infecto-contagiosa. El problema: el VIH todavía está catalogada con enfermedad infecto-contagiosa, cuando es, en realidad, infecto-trasmisible.
En la actualidad, no puede haber mas evidencias científicas constatables que afirmen que las personas con VIH no suponen un riesgo en su puesto de trabajo. Pero vamos mas allá, el concepto de indetectabilidad e intransmisible hace rediseñar de forma urgente la revisión de muchas normativas caducas que garanticen la igualdad de oportunidades de acceso a un empleo.
Un 50% de las personas que viven con VIH se encuentran en situación de desempleo (CESIDA, 2016), lo que las convierte en un grupo vulnerable de exclusión social. Los empleadores deben saber que la tasa de absentismo laboral de las personas VIH esta en torno al 1% en comparación con la media nacional que llega al 6%. No valen más excusas: los órganos legislativos de nuestro país deben tomar acciones concretas antidiscriminatorias de manera urgente porque discriminar una persona VIH, es una violación de los derechos humanos, como lo dictamina el artículo 23 de la Declaración de Derechos Humanos:
Toda persona tiene derecho al trabajo, a la libre elección de su trabajo, a condiciones equitativas y satisfactorias de trabajo y a la protección contra el desempleo. Toda persona tiene derecho, sin discriminación alguna, a igual salario por trabajo igual.
Según datos de diversos estudios e informes realizados en España, la realidad de las personas con el VIH en relación al acceso y la permanencia en el mercado laboral se caracteriza por un elevado nivel de desempleo que llega a superar el 50%.
Entre los factores que agravan esta situación no estarían ni la edad (el 63% de las personas con el VIH en España tiene entre 20 y 49 años, la época más productiva del ser humano) ni la falta de interés de la persona por trabajar (la mayoría querría conseguir un trabajo y por ello busca empleo).
Por desgracia, la falta de información, los mitos, el estigma y la discriminación asociados a la enfermedad son los factores que imposibilitan el acceso al empleo de las personas con el VIH o su permanencia en los puestos de trabajo, ya que algunas de éstas han experimentado discriminación y rechazo. En España, según el estudio “Evolución de las Creencias y Actitudes de la Población Española hacia las Personas con VIH entre 2008 y 2012” de SEISIDA (Sociedad Española Interdisciplinaria del Sida), el 25,8% de las personas encuestadas se sentiría entre algo y totalmente incómoda si alguna persona de su entorno laboral tuviera VIH y el 23,7% trataría de evitarlo.
Desde nuestra entidad, participamos en la campaña #yotrabajopositivo a través de la coordinadora Trabajando en Positivo.
Desde Apoyo Positivo, defendemos y exigimos el respeto de los derechos humanos universales, basados en la libertad inherente, dignidad e igualdad para todos los seres humanos, denunciando estos casos de discriminación y apoyando a las personas que sufren esta vulneración de sus derechos a nivel integral.
Si crees que tus derechos como trabajador han sido vulnerados por alguna situación ligada al VIH, puedes ponerte en contacto con nuestros trabajadores sociales llamando al 913581444.