Y el cuerpo se hace nombre: un canto a la libertad

Consuelo Trujillo, y el maravilloso equipo artístico que la rodea, aparecieron en el camino de Apoyo Positivo a principios de este año. Desde el primer momento, pudimos ver, por la rápida conexión que surgió, que sería una colaboración fructífera.

La propuesta que nos hicieron fue la siguiente: estamos en pleno proceso de investigación y creación de un proyecto sobre identidades y nos gustaría que nos dieseis vuestro apoyo desde vuestro conocimiento y experiencia como entidad.

Pues, dicho y hecho, aceptamos el reto y nos pusimos manos a la obra.

Por un lado, ofrecimos al equipo un soporte a nivel teórico y conceptual de lo que son las identidades, las orientaciones del deseo y, en general, las diversidades y las distintas vivencias de las sexualidades que ellas conllevan.

La otra vía de colaboración fue la participación en un taller vivencial de algunas personas pertenecientes al grupo Welove. A través de la palabra, la expresión, el baile, el movimiento de nuestros cuerpos…, fuimos poco a poco desnudando nuestras almas, exponiendo nuestras experiencias y emociones, reflexionando sobre nuestra educación, nuestra cultura y cómo ésta influye en nuestras realidades, cómo nos hace entendernos, vivirnos y expresarnos como seres sexuados.

Y en lo que se refiere a este taller, queremos agraceder a Michael, Sebas y Mike, nuestres chiques del grupo Welove, la valentía que demostraron durante la actividad.

Es difícil mostrarse de una manera tan sincera y abierta ante personas desconocidas, pero depositaron toda su confianza en nosotros/as y en el equipo artístico.

Y, por fin, llegó el momento. El 30 de mayo, dentro de la V Muestra de Creación Escénica Surge Madrid, se hacía un ensayo abierto del laboratorio al que nos invitaron. Acudimos parte del equipo Welove que participó en el proceso creativo, con cierta incertidumbre por el resultado, pero con la certeza de que algo emocionante nos íbamos a encontrar.

“Y el cuerpo se hace nombre” es una pieza ecléctica donde convergen disciplinas como la danza, el teatro, las artes plásticas, la música, la poesía, la performance y. sobre todo, el amor y las ganas de hacer las cosas con cariño y desde el respeto.

El resultado de estos meses de trabajo e investigación fue, en definitiva, una verdadera celebración del Yo, de la persona, independientemente de sus etiquetas y cultura. Una celebración del cuerpo, el cuerpo libre, de la más pura expresión del ser, espontánea y liberada sin ataduras y sin el deseo de la aceptación ajena. El poder decir en voz alta “soy como soy”. Como se decía durante la representación, necesito creer que posarás tu mirada sin miedo sobre mi cuerpo en libertad.

Unos cuerpos que se expresan a través del movimiento, del baile, mostrando los deseos, los impulsos, los sueños de la persona. ¿Cuáles son las motivaciones de cada uno? “Yo bailo para no olvidar quien soy”, “yo bailo para tener la última palabra… y la primera”, “yo bailo para darle sentido al sufrimiento”.

 

Lo distinto, lo que nos parece lo otro, genera miedo. Miedo por el desconocimiento, por la ignorancia y esa incertidumbre, inevitablemente, es la que nos lleva a rechazar al diferente. La utopía sería una sociedad que acepte esas diferencias, donde lo importante no sean las etiquetas, máscaras o roles de los cuales seamos poseedores si no las personas. Todos diferentes pero, todos iguales, personas al fin y al cabo, pero no por eso mejores ni peores…

¿El objetivo final? Romper con años de represiones, control, normativas sobre nuestros cuerpos y deseos. Desmontar nuestra cultura y permitirnos a nosotros mismos, SER. Como decía Fabre, los instintos están enterrados bajo siglos y siglos de civilización. Permitirnos, a través, del arte, a través de la cotidiano, desenterrar esos instintos, nuestra libertad de vivirnos como somos.

Gracias por darnos la oportunidad de participar y disfrutar de este proyecto tan bonito.

Ficha técnica:

Directora del laboratorio: Consuelo Trujillo
Dirección escénica: Andrés Waksman
Ayudante dirección: Kiko Ortega
Dramaturgia: Ana Rosseti, Elizabeth Duval y Consuelo Trujillo
Creación e Interpretación: David Darife, Elizabeth Duval, Celeste González, Borja Maestre, Iñaki Rubio, Consuelo Trujillo y Ángela Villar
Creación sonora: Iñaki Rubio
Artista plástico: David Darife
Vestuario: Eugenia Gusmerini
Iluminación: Nacho Gómez
Didáctica en la Danza: Elena Cordoba, Celeste González, Lola Jiménez y Andrés Waksman
Coordinadoras de producción: Blanca Serrano y Marta Betriu
Fotografía: Eva Rodríguez
Relación con Colectivos: Borja Maestre
Colectivos que han colaborado: Apoyo Positivo (ONG) / Imagina más (ONG) / Programa LGTBIQ de la Comunidad de Madrid
Referentes: Elizabeth Duval, Celeste Gonzalez, Paul Beatriz Preciado y Alana Portero
Colaboración: CriaturadelArte y Real Coliseo Carlos III de El Escorial