Como bien dice el refranero popular, y en buena medida es cierto, «somos lo que comemos».
La alimentación nos sirve para un triple propósito:
- Obtener la materia prima con la que construimos nuestro cuerpo.
- Conseguir la energía necesaria para llevar a cabo todas las actividades de nuestro día a día.
- Acto social y cultural.
La relación entre alimentación y salud ya fue percibida en la antigua Grecia y, en la actualidad, se ha demostrado que numerosas enfermedades que afectan a un porcentaje alto de la población, como son la obesidad, la diabetes tipo II, la hipertensión, la hipercolesterolemia y varias enfermedades cardiovasculares, se pueden prevenir y paliar controlando que la alimentación sea variada y equilibrada.
En una situación que comprometa o debilite el estado de salud, como puede ser la infección por VIH o hepatitis C, está claro que la alimentación no va suplir la acción de la medicación ni va a suponer una cura universal. Pero un correcto control de la dieta sí va a ser fundamental para paliar ciertos efectos secundarios del tratamiento y de la propia infección, así como para asegurar una correcta absorción de los principios activos de los fármacos. Además, una buena alimentación nos ayuda a sentirnos bien con nuestro cuerpo, controlar la forma física y mejorar nuestra autoestima.
Por todo esto, en Apoyo Positivo, vamos a iniciar el taller Somos lo que comemos, sobre alimentación y hábitos saludables, del 26 de septiembre a 19 de diciembre, de 18:00 a 19:00, dirigido a todas las personas que quieran cuidar su alimentación, y que quieran informarse sobre como mejorar la alimentación si se tiene VIH, hepatitis o se consume algún tipo de droga.
El taller está dividido en cinco bloques :
1.- Conociendo nuestro cuerpo y nuestras necesidades nutricionales.
En este primer bloque se tratará el autoconocimiento en relación a la alimentación: el sentido del gusto (el placer de comer), el aparato digestivo y las principales afecciones del mismo (haremos también hincapié en las principales dolencias digestivas asociadas a los antiretrovirales y al consumo de drogas), cálculo e interpretación del índice de masa corporal, tasa metabólica basal, necesidad de aporte energético diario… Analizaremos la autopercepción del estado de salud de los participantes. Qué entendemos por salud y enfermedad. Definición actual del término salud y todos los ámbitos sobre los que se aplica. Y hablaremos de trastornos alimentarios relacionados con la edad, medicación o hábitos de vida nocivos como la lipodistrofia, la osteoporosis, la hipercolesterolemia, problemas hepáticos y renales o la anorexia nerviosa.
2.- ¿Qué son los nutrientes?
Introducción teórica a qué son, por qué son importantes y en qué alimentos podemos encontrar las distintas familias de nutrientes: proteínas, hidratos de carbono, lípidos y vitaminas y antioxidantes. La importancia del agua y una buena hidratación. Cantidades diarias recomendadas de los distintos nutrientes en función del grupo de edad y sexo. Necesidades nutricionales en el envejecimiento (puesto que se ha observado un envejecimiento prematuro en personas con altos niveles de ansiedad, estrés, diabetes, obesidad, tratamientos antivirales…).
3.- Hacia una alimentación saludable.
La pirámide alimenticia, dieta equilibrada y dieta mediterránea. Cómo planificar una alimentación saludable. Diseño de un menú semanal equilibrado, sugerente (rico y apetecible) y saludable, basado en el análisis de necesidades nutricionales personales que se haya hecho en las sesiones anteriores. Debate sobre si el vegetarianismo/veganismo es o no un modelo de alimentación saludable.
4.- Consumiendo alimentos sanos y seguros.
Compra «inteligente», interpretación de etiquetas de alimentos, consumo de alimentos procesados, mitos y leyendas urbanas sobre alimentación.
5.- ¡En movimiento! La importancia de mantenerse activo.
Aquí trataremos la importancia de llevar una vida no sedentaria, recomendaciones de actividad física diaria, hábitos cardio-saludables… Y colaboraremos con los talleres de yoga y pilates, y con las actividades de ocio y tiempo libre que se llevarán a cabo a partir de octubre.
También trabajaremos, de forma individual, pequeños retos o modificación de hábitos a través de diversas dinámicas, como el reto de los 21 días, tablas… De esta forma, cada participante podrá plantearse alguna meta, o pequeño objetivo, accesible semanal o mensual y compartir sus logros con el grupo. Con estas netas, podremos reflexionar sobre nuestros hábitos y tomar mayor conciencia de control sobre nuestra vida e iniciativa de cambio.