Hace más de un año, nuestrxs INDETECTABLES cobraban vida en SEXO, DROGAS Y TÚ, la primera temporada de una serie que nació como un proyecto de comunicación en salud sexual desde la comunidad diversa. Un intento de reformular el conocimiento e información en prevención y llevarlo a otros espacios y formatos que ayudasen a combatir, además, el ESTIGMA asociado al VIH, a las ITS, al sexo, a la sexualidad, a la diversidad, a los penes, las tetas, los pezones, las vulvas, los besos, los cuerpos, los abrazos, las penetraciones, el fist-fucking, los cockrings, los lapos, los latigazos, el bareback, el amor, el poliamor, la libertad sexual,…, en definitiva, el ESTIGMA a las diversas formas de ser, estar, desear y amar en la vida
INDETECTABLES supone una pequeña gran idea, una arriesgada aventura, que nos llevó a montar 5 episodios junto a directores y guionistas como Sonia Sebastián, Paco Tomás, Guillem Clúa, Juan Flahn, Afioco y Antonio Hernández Centeno, hablando de:
- ITS entre lesbianas,
- de la PEP o pastilla post-exposición (la pastilla del día después),
- de transfobia y VIH,
- de chemsex
- y de auto-estigma
Y que vieron la luz en el mágico Teatro de La Latina, en una fantástica noche, que dio el pistoletazo de salida de un proyecto complejo y difícil de hacer, en especial desde una entidad social como es Apoyo Positivo, pero inmensamente satisfactorio.
Más de 85 secciones oficiales en toda la geografía española, pero también en lugares remotos como Guayaquil, Serbia, Grecia, Colombia, EEUU, Bolivia, Argentina, Brasil, Chile, Osaka, Kyoto, Sydney o Alburquerque, y varios premios como el Premio CIMA y Zinentiendo en el Festival de Cine de Zaragoza, el Premio al Mejor Cortometraje en Tels Quel en Bélgica, Mención Especial en CINHOMO, Premio Mejor Campaña Sanitaria Nacional en los Premios Jovell 2018 o el reciente Premio SOMOS PACIENTES a Mejor Campaña en Redes 2018.
Y esa era la intención, porque para Apoyo Positivo, cada vez que tenemos la oportunidad de mostrar al mundo uno de los episodios de INDETECTABLES, esperamos estar informando, sensibilizando y moviendo emociones para ir reduciendo ese gran enemigo todavía muy fuerte en nuestra sociedad, como es el ESTIGMA: la verdadera epidemia social.
“EL MIEDO AL ESTIGMA CONDUCE AL SILENCIO Y EL SILENCIO ES LA MUERTE”, nos dijo en su momento Kofi Annan, antiguo secretario de ONUSIDA.
Si queremos acabar con la epidemia del VIH, con otras infecciones, con la lgtbifobia, con el acoso, la discriminación social, los miedos, la exclusión, la soledad que genera esa presión por ser quien no somos, incluso en nuestros propios colectivos, para ello, para acabar con todo esto, tenemos que abordar el ESTIGMA, no sólo relacionado con el virus, sino con todas esas realidades y comunidades afectadas, que transversalmente configuran esa imagen distorsionada y ocasionan inmensos problemas en el día a día de muchas personas.
Hace unos días un famoso presentador español, Dani Mateo, afirmaba que no había estigma ya hacia las personas con VIH. A continuación uno de sus colaboradores, Mario Vaquerizo, decía: “que hoy en día un joven se infecte de VIH, con toda la información, no merece mi respeto, es un gilipollas”, además de afirmar también, su pareja, Alaska, que sus “amigos homosexuales no cuidaban su salud para evitar infecciones”. Y creemos que deben conocer a bastantes homosexuales por su trayectoria profesional abanderando la bandera arco iris. ¿Se refería al uso del preservativo entre los homosexuales? ¿Cómo es el uso del condón en heterosexuales? Homofobia, serofobia.
Hace un par de días, una colaboradora de Indetectables, que ha participado en nuestra campaña #placajealVIH, se encontraba con mensajes de gente que asumía que ella tenía VIH porque aparecía en la campaña. Por colaborar o ayudar a gente con el virus. De esto sabemos mucho las personas que somos caras visibles de una comunidad invisible, precisamente por el estigma, pero obviamente aún más lo sabemos las personas directamente afectadas por el virus. Más serofobia.
El problema no es ese presentador, ni la curiosidad del que pregunta, el problema es global, y de no afrontamiento de las realidades que suponemos todxs, mientras apuntamos con el dedo al que tenemos al lado, en vez de mirar nuestras propias verdades. El comportamiento social y la escasa visibilidad del VIH siguen siendo el principal origen de la situaciones de riesgo a las que nos exponemos en nuestra salud sexual. Todas esas palabras, miradas y juicios acercan a una persona más a una infección por VIH, a un estado depresivo, a un uso problemático de sustancias…
Y ni siquiera, cuando se denuncia y puntualiza el impacto de ese estigma a espacios como ese programa de radio, somos capaces de hacer un ejercicio honrado de empatía y reconocer los errores cometidos, intentando hacer pedagogía y aprender desde ellos. Simplemente nos volvemos a poner “el lazo rojo”, esa etiqueta de “yo lo apoyo, yo tengo un amigx seropositivx”, pero no hablamos de lo que verdaderamente importa: que hay detrás de cada una de esas expresiones y juicios, que incluso se vuelven a perpetuar en ese intento de lavado de estigma. Venga SIDA.
El estigma supone esa herramienta del patriarcado, que sigue sometiendo a muchas personas por su vulnerabilidad, por su diversidad, que le sirve de brazo armado para controlar la vida de muchas personas y excluirlas socialmente, y que la mayoría de la sociedad mantenemos porque siempre va a ser más fácil de vivir del lado del estigma, no enfrentarlo, reír lo cruel, callar lo evidente, con tal de “no ser uno de esos”.
Por ello nuestra segunda temporada, hace un recorrido por diferentes aristas de esa realidad que es tener VIH, o pertenecer a un grupo social concreto, o vivir de cerca esa realidad, en 5 episodios muy diferentes que esperamos que contribuyan a todo ese trabajo global para acabar con la discriminación y sus consecuencias.
El pasado 26 de noviembre tuvimos la oportunidad de presentarla en los emblemáticos cines del Palacio de la Prensa de Madrid, donde nuestros INDETECTABLES llenaron la sala de todos estos pensamientos, con el fin de provocar un cambio en el contexto social. Los cinco episodios de ESTIGMA, “Chenoa’s Fault”, dirigido por Abril Zamora, “Bla Bla Land” de Fernando Gamero, “Siempre que lo cuento” de Roberto Pérez Toledo, “Volcánica” de Alberto Velasco y “Estigma” de David Velduque están llenos de historias diarias, de vidas y emociones que esperan remover espacios de reflexión, de manos de artistas como Aitana Sánchez Gijón, Ana Otero, Luis Bermejo, Carmen del Conte, Alvaro Fontalba, Deborah Ombres, Sharonne, Manu Moya, Albert Suarez, Jorge Calvo, Ángel Saavedra, Manu Tejera, entre otros.
ESTIGMA ha sido posible gracias a muchas manos, a equipos de producción que lo han dado todo, con muy pocos recursos, en un momento en el que parte de la plantilla de la ONG nos íbamos al paro para evitar consecuencias peores por lo recortes en VIH, por no considerar, por parte de nuestra administración, la importancia de la atención a la salud sexual, la prioridad que debe ser. GRACIAS a esos 5 valientes directores, a todo el equipo artístico, que han sabido acompañarnos y sacar adelante este trabajo, a sus equipos técnicos, a los voluntarios, a los colaboradores como LELO, o la Coordinadora Trabajando en Positivo, a la Consejería de Cultura de la Comunidad de Madrid y al propio Palacio de la Prensa por toda la colaboración.
GRACIAS a todas las personas que nos han apoyado en un 2018 no sencillo. Gracias a todxs ESTIGMA es ya una realidad.
Y ojalá, como decíamos el año pasado, a través de indetectables, se consiga un efecto de bola de nieve de buenos propósitos, que rompa con la serofobia y otros estigmas, ¡ES SENCILLO, la discriminación no tiene ninguna base científica, sólo está en nuestras cabezas!
Necesitamos ayudarnos, cuidarnos, comprometernos, hacer que nuestra sociedad se sienta orgullosa de cuidar nuestra tolerancia y diversidad. Y pasear presumiendo de ella. Sin estigmas.
Seguiremos hablando de estigmas a lo largo del desarrollo de esta segunda temporada y más aún haciendo camino hacia la tercera parte de INDETECTABLES: PATRIARCADO.