MI YO EMOCIONAL DURANTE LA CUARENTENA.

Sabemos que el confinamiento de estas semanas, debido a la pandemia del COVID-19, y la situación y el perjuicio que estamos viviendo, puede llevarnos a diferentes situaciones y generar irritabilidad, frustración, depresión o ansiedad.

De este modo, es especialmente importante que nos cuidemos y utilicemos esta etapa para conseguir un mayor autoconocimiento, poder conectar con nuestras emociones, escuchando, no luchando contra ellas, aceptándolas, y aprender a manejarlas.

Aquí te dejamos algunas ideas que pueden ayudar, en estos días, a gestionar tu yo emocional: LOS AUTO-CUIDADOS.

Además, desde el equipo de Apoyo Positivo, nos embarcamos en un nuevo programa online en el que vamos a ayudarte y darte las claves para esta gestión emocional, que te sirvan para asentar unas bases que mejoren tu calidad de vida, ahora mismo, durante la cuarentena, y en tu futuro.  

FÍSICO:

  • Es muy importante que no descuidemos la higiene personal ya que, a veces, decidimos, al no tener que salir de casa, quedarnos todo el rato en pijama (el mismo pijama en ocasiones) durante días. Tener unos hábitos, como el día a día de nuestra vida antes del confinamiento, ayuda a que nos sintamos mejor. Levantarnos a una hora concreta, ducharnos, vestirnos, peinarnos y ponernos guapes, estar bien por fuera, pero, sobre todo, nos hace sentir bien por dentro.
  • Es importante seguir una rutina y mantenerse activo para no caer en la desidia o la apatía.
  • Es importante dormir bien para mantener la salud física y emocional.
  • Una dieta sana y equilibrada y un horario de comidas nos ayudará a estar sanos y a no perder la forma física.
  • La actividad física es muy importante. Ahora que estamos en casa nuestra movilidad cotidiana está reducida. Empezar el día con ejercicio o actividad te ayudará a encontrarte bien física y mentalmente. Puedes hacer rutinas de ejercicios en casa, yoga, baile, estiramientos…
  • Ahora que pasas más tiempo en casa, es un buen momento para aprovechar y darte un baño relajante con sal o alguna esencia. Puedes poner música relajante, encender un incienso o una vela y relajarte con un buen baño o una ducha caliente.
  • Puedes hacer mascarillas caseras para el pelo o para la cara con huevo, aceites y otros ingredientes que podrás consultar en internet. Un buen exfoliante para el cuerpo se puede hacer mezclando azúcar y jabón. Cuídate de modo especial estos días, incluso si antes no lo hacías o no tenías el tiempo.
  • Limpiar y organizar los espacios también es de mucha ayuda. “Cuando limpiamos y ordenamos la casa, la mente se limpia y se ordena”. Además, si tienes que pasar los días en casa, mejor hacerlo en un ambiente limpio y ordenado, ya que esto tiene implicaciones directas sobre nuestro estado de ánimo.
  • Explicar a los hijes la situación con información real, adecuada a su edad, potenciar la correcta higiene de manos, con juegos como los vistos en redes (dedo con jabón que se acerca a un plato con agua y pimienta, viendo como la pimienta se aleja del jabón) y una buena planificación junto a ellos, de tareas escolares, juegos, responsabilidades personales, etc., te ayudará a tener un control sobre tu tiempo y gestionar el estrés derivado, haciendo la convivencia mejor para todos los miembros de la casa.

EMOCIONAL Y COGNITIVO:

Una mente en equilibrio, y libre de estrés, nos ayuda a ser más productivos y a estar de mejor humor.

  • Dedicarnos tiempo de calidad, ya sea en familia si vivimos con pareja e hijes, con la pareja, o compañeres de piso. Es importante que sepamos cómo socializar con las personas con las que pasamos la convivencia y busquemos relaciones positivas que nos ayuden a llevar mejor la situación y sirvan de apoyo mutuo.
  • Entrena tu cerebro hacia el lado positivo. Cada noche, antes de ir a dormir, haz una lista con papel y lápiz y escribe diez cosas positivas que te hayan ocurrido durante el día. Por la mañana, vuelve a leer la lista que hiciste la noche anterior. Así entrenarás tu cerebro fijándose en lo positivo y no en las cosas que te angustian. Un cerebro positivo no es compatible con un cerebro negativo, ¡verás que bien sienta! Ejemplos de esa lista: “He pasado tiempo de calidad con mi hije, amigue, familiar”; “Probé una receta que me salió genial y disfrutamos comiéndola en casa”; “He visto una película que he disfrutado mucho”, o, “me han contado un chiste muy gracioso”.
  • Hacer ejercicios de relajación, respiración.
  • ¡Prueba la meditación! Está comprobado que meditar reduce la parte del cerebro que genera el estrés y nos ayuda a estar más estable emocionalmente (investiga en internet la práctica del mindfulness y ¡prueba!) 
  • Dedicar tiempo también para nosotres, tener una agenda muy ajetreada entre teletrabajo, videollamadas, actividades grupales de vecindario, puede ser divertido y ayudarnos a pasar esta época difícil, pero puede hacer que cuando llega la noche nos sintamos indefensos, se potencie la sensación de soledad o aislamiento. Aprender a estar a gusto a solas durante el día, y procesar nuestras emociones sin juzgarlas puede ayudarnos a estar más equilibrades a cualquier hora. 
  • Aprovechar el tiempo en casa para hobbies dejados a un lado o nuevos, por el ritmo de la vida laboral/social: música, manualidades, bailar, o ver una buena película.
  • Es primordial contrastar las noticias o mensajes que compartimos, un buen recurso para ello es la web maldita.es.
  • Reducir la exposición a las noticias a una o dos veces al día. Es bueno estar informados, pero la sobrecarga de información nos puede absorber.
  • Puedes organizar tu día mediante una lista de tareas o un horario.
  • Leer un buen libro. si no tienes en casa, puedes hacer un pedido online o buscar algunas de las fuentes gratuitas que podemos encontrar por internet.
  • Sé creativo y comienza algún proyecto de manualidades.
  • La desconexión 2.0 también es muy importante. ¿Qué tal si apagas el móvil un rato mientras haces alguna tarea como las anteriores? Ayudará a mantener tu concentración en aquello que haces.
  • Párate a pensar alguna actividad social o ejercicio grupal que siempre hayas querido hacer y nunca hayas hecho por este o aquel motivo. Quizá es un buen momento para tomar consciencia y planear comenzarlo cuando acabe la cuarentena.
  • Diferenciar lo que podemos controlar de lo que no. Podemos controlar el quedarnos en casa para evitar contagios, sentirnos bien por hacerlo. No podemos controlar que otra gente salga… a veces no tenemos toda la información, como casos de personas que salen con sus hijes con TEA a dar un paseo porque lo necesitan.
  • Probar nuevas recetas, aprender una nueva habilidad (videotutoriales o cursos online gratuitos) y hacer ejercicio son formas productivas de pasar el tiempo que además de ayudarnos a mejorar habilidades, nos hará sentir mejor.
  • No dudes en solicitar ayuda profesional si la necesitas.

Enriquecer tu intelecto y mantener tu mente entrenada es otra forma de autocuidarnos. El crecimiento y la evolución mental y la adquisición o mejora de nuevas habilidades favorece la seguridad y la confianza reforzando tu autonomía personal.

SOCIAL:

No descuides tus relaciones sociales sobre todo si está sole. 

El ser humano es un animal social y, como tal, necesita de contacto con los demás. Conectar con los demás ayuda a sentir que no estamos soles, a sentirse apoyade en momentos complicados y a tomar decisiones con mayor seguridad y a mantenernos motivades.

En momentos de crisis las redes de apoyo son de mucha ayuda.

  • Haz video llamadas con amigos o familiares, habla con les vecines cuando puedas hacerlo sin salir de casa.
  • Habla con alguien que te escuche y expresa tus sentimientos.
  • Escucha a los demás. A veces el solo hecho de tener alguien que nos escuche en momentos difíciles tiene un valor incalculable.
  • Transmite tus mensajes de apoyo, tranquilidad y calma.
  • Motiva a la familia, amigues e hijes a que todo saldrá bien y este momento de crisis pasará.
  • Aprovechar para estructurar bien las tareas domésticas entre todes, aparte de poder crear una tabla con las tareas para cada persona que viva en el hogar, compartir también los descansos. Si una persona necesita parar, todes lo hacen.
  • Juega a juegos de mesa, ya sea con las personas con las que estás en casa o con los amigues/familiares a través de las distintas plataformas online.
  • Aprovecha para ayudar a personas en peores circunstancias que nosotres (como personas mayores de nuestro edificio que no pueden ir a comprar, o recolectas para personas en situación de desamparo) 
  • Y, por supuesto, ¡pide ayuda a los demás si la necesitas!

La situación del COVID-19 puede además despertar mayores inquietudes y temores en personas que ya tengan una diversidad clínica, por la propia infección del coronavirus, una situación de dificultad durante el confinamiento, por su diversidad o por otro tipo de patología previa, como una adicción, por motivos relacionados con el fenómeno de chemsex u otras razones previas que pueden alterar nuestra salud emocional y mental en cuarentena.

Si tienes VIH, es posible que te afecte más porque te preocupe tu situación a nivel médico (todo esto puede aumentar el miedo a un riesgo en tu salud) o porque te recuerde a la situación del diagnóstico del virus, haciéndote revivir de nuevo esos momentos, creando a veces una mayor obsesión por la transmisión, miedo a falta de disponibilidad de fármacos, o miedo a la dificultad de la recogida de medicación durante este proceso, entre otras dudas e inquietudes.

Puedes consultar nuestra entrada VIH y COVID-19 para encontrar respuestas y desmentir bulos y, sobre todo, continuar con tranquilidad tu estándar de cuidados y tratamiento, ya que no existe motivo para preocupación por la crisis del coronavirus.

Por otra parte, es posible que, en estas circunstancias, estemos sufriendo más dificultades en el confinamiento por conflictos derivados de la falta de aceptación, por parte de nuestra familia o compañeros de vivienda, de nuestras diversidades: orientación sexual, identidad de género, etc.

Es importante gestionar el conflicto y saber que la situación es excepcional y que, probablemente todes estamos pasando por momentos difíciles que pueden acuciar estos problemas o violencias domésticas. Para ello, nuestro equipo ha desarrollado una línea de contacto especializada en diversidad, donde puedes contarnos tu situación y encontrar una posible solución a pesar de las circunstancias.

En general, la situación derivada por el coronavirus es algo que no hemos vivido antes como sociedad.  Toda persona está desarrollando, por primera vez su propia capacidad de superación, y resiliencia, ante la pérdida de contacto humano, de libertad de movimiento y de las actividades diarias que forman parte de nuestros hábitos. Parar de una forma tan radical no es sencillo, especialmente para personas que ya están en procesos complejos con la gestión de sus emociones.

En los próximos días vamos a lanzar nuevas entradas especializadas en estos aspectos, con especial atención en las personas con adicciones, o con una práctica de chemsex problemático, que no están siendo capaces de gestionar sus emociones de forma adaptativa. El equipo psicosocial multidisciplinar del proyecto SEXO, DROGAS y TÚ, ha volcado su trabajo de manera virtual para dar respuesta a problemáticas emocionales y psicológicas a través de la intervención 2.0, y virtualizando alguna de las actividades que realizábamos de forma presencial, como el programa de mindfulness y una nueva propuesta de gestión emocional, y de conocimiento de nuestro cuerpo, a través de la disciplina de Yoga Kundalini. 

Hagamos de esta cuarentena una oportunidad de autoconocimiento y crecimiento personal que nos haga mejores personas y, en consecuencia, una mejor sociedad.

#QuédateEnCasa

Ilustraciones by @motherofqueer