Sexo en cuarentena y apps.
En estos momentos de confinamiento, en los que estamos hablando también sobre el chemsex, sobre tomar conciencia de nuestras emociones, de nuestros pensamientos, cómo pasar mejor la abstinencia, etc…no podemos dejar de hablar de las “Apps de ligoteo” y la función que tienen en nuestras vidas y en nuestras prácticas sexuales, en relación con el chemsex, pero, en general, para cualquier persona que hace uso de ellas para sus relaciones eróticas, sociales, etc.
Ya que vamos a pasar tiempo en casa, podemos hacernos algunas preguntas:
- ¿Qué busco hoy en la App?, ¿busco fotos?, ¿busco hablar?, ¿busco quedar?, ¿busco un tipo de excitación o erótica como en el porno?
- ¿Me está dando lo que busco?, ¿me está generando ansiedad?
- ¿Qué está aportando a mi vida?, ¿me está aportando algo positivo o no?
- ¿Siento que hago el uso de la aplicación que buscaba o sin darme cuenta acabo haciendo cosas que no pretendía? ¿Cómo me siento después de utilizarla?
Las Apps pueden ser una puerta de entrada a la práctica del chemsex, y a la pérdida de control y, en estos momentos, en que otros espacios en los que se practica sexo están cerrados al público (saunas, bares, cuartos oscuros…), pueden ser, en algunos casos, la razón que nos haga salir de la cuarentena, y saltarnos el confinamiento obligatorio.
No sólo las aplicaciones de contacto. Somos conscientes que cualquier red social, Instagram, incluso Facebook, se han convertido, en diferentes espacios donde se gestan encuentros sexuales cibernéticos, que pueden facilitar, con el factor de la geolocalización, el romper el estado de alarma y acudir a un encuentro sexual, una sesión, un chill con amigos o desconocidos.
En ocasiones, el uso de este tipo de aplicaciones empieza a ser cada vez mayor, toma más tiempo del que hemos planeado para ello, debido al confinamiento, y muy posiblemente acabe en una quedada con una de las personas con quien estamos hablando, o con varias personas, o a veces podemos estar horas y horas en búsqueda de algo, y no quedar con nadie.
Si siempre que abres una aplicación es para quedar con alguien, puede que, en estos momentos de confinamiento, te sea más llevadera esta situación si decides darte un descanso de éstas, y del propio ligoteo.
En ocasiones, la inercia, el grupo, los iguales, las situaciones nos llevan a adoptar rutinas, que ni siquiera nos planteamos ni pensamos porqué son parte de nuestro día a día, ni siquiera, qué nos reportan.
Te invitamos a que te replantees el uso que estás haciendo y has hecho en el pasado de las aplicaciones, como una oportunidad en estos momentos que nos tocan vivir.
Y, al igual que te proponíamos espaciar consumos y aprovechar el confinamiento para ello, también puede ser saludable mantenerse alejado de Grinder, Wapo, Srcuff, Macho BB, etc…, darse un respiro y recuperar el control (si en algunos momentos lo hemos podido perder), respecto al consumo de drogas, uso de aplicaciones de contacto y relaciones sexuales.
Para ello, también es bueno saber qué sucede en nuestro cerebro cuando usamos estas aplicaciones y cómo afecta a la toma de decisiones, como la de romper la cuarentena y cometer un acto delictivo en el estado de alarma:
- El “centro de recompensa” de nuestro cerebro (que nos informa de si algo es placentero o no) se ve afectado por su uso y estimulación, por lo que se desarrolla una compulsión poco saludable mientras estamos atrapados en casa y tal vez más inactivos de lo habitual.
- Es como una máquina tragaperras, en el mismo momento que echamos la moneda, suena la musiquita, giran las imágenes, y ¡a veces incluso tenemos premio! Hay personas que prueban con una moneda, y si no les sale premio, se van tranquilamente. Otras no pueden dejar de probar hasta que vuelva a salirles premio, aunque no ocurra más. Esto ocurre también con este tipo de Apps, a veces el premio es hablar con alguien, o ver fotos calientes, o que te digan los sexy que eres, o planificar una sesión. Y cada vez que hecho más monedas, cada vez que invierto más tiempo en estas Apps, estoy recompensando más y más a mi cerebro de forma placentera (y compulsiva), con la consecuencia de seguir (aunque no quiera) buscando ese placer y recompensa, muy similar con el deseo de consumo de las sustancias (mefe, tina, ghb…).
- No hacer uso de ellas puede llevarte a experimentar, igual que con el abandono tan continuado de drogas y sexo, síntomas como la ansiedad. Te recomendamos que leas también sobre ello, y que si quieres, hagas los ejercicios que te proponemos.
- Puede ser un buen momento para recuperar cosas que antes nos gustaban y nos proporcionaban placer como ver una peli o una serie, hablar con un colega por skype, dedicar tiempo a comer bien, hacer algo de ejercicio en casa o plantearte alguna de las relajaciones o terapias que te ofrecemos desde la entidad.
Existen ya numerosos artículos sobre el uso de apps, específicamente dirigidoa además a algunos colectivos como el LGTBIQ, que abordan toda esta problemática, incluidos recursos donde acudir si tienes ya un problema con su uso.
Os dejamos un par de links para que consultéis, especialmente uno en inglés, We need to talk about how Grindr is affecting gay men’s mental health, escrito por un psiquiatra gay sobre el uso e impacto mental del uso de Grindr, y otro en español, en el que profesionales como Gabriel J. Martín, Tinder (y Grindr) te están destronzando la vida, donde repasan algunas de las cosas que te hemos contado en esta píldora.
Y, si eso es complicado, igual desde Apoyo Positivo también podemos echarte una mano para planificar tu tiempo libre o para hablar con un profesional de salud mental y contar tus emociones al respecto y qué soluciones puedes buscar para gestionarlas de una forma diferente.
#QuédateEnCasa
Ilustraciones by @motherofqueer