Creemos que, contra la falsa creencia de que si una persona no ha salido del armario a lo largo de su vida no lo hará en su vejez, se debe tener en cuenta que, a pesar de que muchos ancianos LGTB no acaban acudiendo a locales de ocio y de relación, esto en ningún caso quiere decir que no hayan salido del armario, sino que no disponen de espacios propios, incluso dentro de las asociaciones LGTB.
Siguiendo la línea de los dos post anteriores en torno a la vejez en personas LGTB, os hablamos en este sobre las residencias de ancianosLGTB.
Y nos encontramos que, en este colectivo, cuando se llega a la vejez sin hijos (en el caso de tenerlos muchas veces no existe relación con ellos fruto de la homofobia), existe la necesidad de personas que los cuiden (en principio más que las heterosexuales). Como ya indicábamos en el post anterior, estos cuidadores no tienen por qué estar preparados ni formados para atender a este colectivo, por lo que se dan casos de cuidadores homófobos.
A raíz de la ley del matrimonio entre personas del mismo sexo aprobada en España el 30 de Junio del 2005 por el Partido Socialista Obrero Español (PSOE), parejas del mismo sexo pueden casarse y tienen una serie de derechos como la adopción conjunta, la herencia y la pensión por viudedad, por lo en este sentido, creemos que se están abriendo nuevas posibilidades para el colectivo LGTB de cara a llegar a la vejez con mejores previsiones y garantías.
A día de hoy existen ya, tanto en Barcelona como en Madrid, iniciativas pioneras creadas por y para el colectivo LGTB anciano, que están ya realizando no solo una labor asistencial y de acogimiento de las necesidades del colectivo, sino que debido a una mayor disponibilidad de tiempo y menores presiones del entorno social (por no estar trabajando), realizan también una labor de activismo específico.
¿Residencias para ancianos LGTB?
Esta es una discusión que cada día está teniendo mayor vigencia; en España y Europa, la tendencia es intentar integrar a estas personas en centros con todo tipo de ancianos y realizar una formación especializada para los profesionales que trabajen en estos centros.
La discusión esta por tanto abierta, aunque a día de hoy se pueda entender que por parte del colectivo de ancianos LGTB, se prefiera la creación de recursos residenciales específicos para ellos.
En Barcelona nos encontramos con la Fundació EnLlaç que promueve recursos para este colectivo, mientras que en Madrid, nos encontramos con la recientemente creada Fundación 26 de Diciembre que a día de hoy está construyendo un espacio sanitario y de socialización para el colectivo de mayores LGTB y que pretende en el futuro construir la primera residencia para este colectivo.
En el siguiente post relacionado con el tema, intentaremos acercaros la realidad de una de estas fundaciones a través del testimonio de las personas que la dirigen y participan de él.