Apoyo Positivo: Veinte años luchando contra la discriminación

Tras veinte años de trabajo en Apoyo Positivo, la discriminación en el ámbito social del VIH sigue presente, tanto en el trato que las personas afectadas reciben por parte de la sociedad como en la vulneración de sus derechos. Desde la asociación, a diario nos encontramos con afectados que se encuentran totalmente desvalidos ante situaciones de discriminación y menoscabo a sus derechos.

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Y es que, a pesar de los continuos avances sanitarios en este campo, avances que han hecho realidad el que ya no estemos luchando con una enfermedad mortal sino crónica, parece que la sociedad no se ha movido en el mismo sentido, manteniendo un rechazo a este colectivo que provoca situaciones de ataque a sus derechos y libertades.

Y es por eso que, desde Apoyo Positivo, consideramos fundamental el contar con una asesoría jurídica que sirva de orientación en las diferentes situaciones conflictivas que se planteen. Para ello, contamos con abogados voluntarios que te pueden orientar y asesorar.

En el día a día, nuestra asesoría se ve obligada a intervenir en todo tipo de situaciones, entre las que se pueden destacar:

  • Despidos, por la mera condición de ser afectado de VIH.
  • Discapacidad/incapacidad, al no ser valoradas correctamente las secuelas que en determinadas personas produce la enfermedad.
  • Reconocimientos médicos en las empresas, sin que adviertan de su voluntariedad y de cuyos resultados, además, en algunas ocasiones, no se respeta la confidencialidad debida.
  • Falta de profesionalidad en ciertos personales sanitarios, produciendo en el enfermo una sensación de desprecio, discriminación, etc.
  • Profesiones a las que se tiene vetado el acceso de forma injustificada a los afectados de VIH: militares, policias, bomberos, taxistas.
  • Incidencias con aseguradoras, por su negativa a cubrir determinadas contingencias y a asegurar a afectados de VIH.
  • Discriminación en general por la mera condición de ser portador de VIH.

Si ya todas estas situaciones son graves en sí mismas, son aún mucho más preocupantes cuando afectan a personas especialmente desprotegidas, como niños en el ámbito escolar o ancianos dentro del entorno de sus residencias. Sitios estos, la escuela y las residencias, donde se debería cuidar de forma especial la igualdad y la protección a la persona.

Nada justifica en este momento que este tipo de situaciones se sigan produciendo. Nada justifica la indefensión de un colectivo que ve como se ponen más obstáculos a su vida, en una sociedad que debe velar por la igualdad de todos sus ciudadanos, así como brindar una especial protección a aquellos que más lo necesitan.

Desde Apoyo Positivo y, de manera especial, desde su asesoría jurídica, queremos continuar con la batalla por esa igualdad y protección.

Guía de discriminación en el entorno laboral